Culiacán, Sin.- El Instituto Sinaloense de Cultura a través del Museo de Arte de Sinaloa llevó a cabo la clausura de dos talleres, el de creación literaria Descubriendo a López Sáenz y el de pintura CreArte, impartidos por las maestras Georgina Martínez y Rosalí Sánchez, respetivamente, durante el mes de abril para celebrar el Día del Niño.

En el patio del MASIN, con la presencia de los pequeños artistas y sus familias, se realizó el acto de clausura, el cual fue encabezado por Inna Teresa Álvarez, jefa del museo, así como las maestras, quienes compartieron sus conocimientos y esfuerzo para involucrar a los niños en el mundo del arte.

Georgina Martínez se encargó de impartir el taller de creación literaria a partir de la obra del maestro Antonio López Saenz, pintor sinaloense cuya obra se encuentra actualmente expuesta en dos de las salas del recinto cultural y a través de la cual los participantes pudieron dar rienda suelta a la imaginación en sus escritos, creando historias fabulosas que fueron leídas en forma de cuentos y poemas.

Fue así como Ana Lucía y Jorge Eduardo Valdéz dedicaron sus trabajos al mar, presente en la obra del artista mazatleco, así como Valeria Rivera, Abril López y María Alejandra Castillo, quienes compartieron un pedacito de su ser en sus trabajos que serán publicados en la próxima edición del periódico infantil Alas de papel.

La maestra Rosalí Sánchez impartió el taller de creación plástica CreArte, a través del cual niños y niñas de 6 a 12 años se acercaron a las texturas, las formas, las líneas y el color para la creación de coloridas obras plásticas que se exhibieron en el evento de clausura, en la que será quizá la primera exposición colectiva de los futuros artistas sinaloenses.

Entre las técnicas que los participantes aprendieron de la mano de la reconocida artista visual, estuvieron la ilustración, grafiti contemporáneo, bodegón, la línea y el collage.

Al finalizar la entrega de constancias, los niños participaron en juegos tradicionales como la lotería, serpientes y escaleras, el juego de la Oca y armaron rompecabezas, para obtener premios simbólicos, dulces y pastel que contribuyeron a una celebración del Día del niño, inolvidable.

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