Mazatlán.- Como parte de la Temporada Primavera 2024 en el Teatro Ángela Peralta el Instituto Municipal de Cultura, Turismo y Arte de Mazatlán, presentó Coppelia, obra creada hace 154 años, en la cual se asocia el teatro, ballet, danza clásica, danza de carácter y la pantomima.
El principio fue musical con la Camerata Mazatlán bajo la batuta del director concertador Sergio Freeman. Al abrirse el telón, las flautas de la maestra Frida Fernández y María Vakorina y toda la sección de instrumentos de viento se convirtieron en la voz musical que marcaría los movimientos de los bailarines en esta divertida puesta con una escenografía impecable de Víctor Carrizales, la cual condujo al público a dos escenarios espléndidos durante la historia.
Manuel Hernández Suárez –Coppélius– realizó gestos y movimientos explicativos (impecables) casi a modo verbal, para que se comprendiera la trama y el contenido de la obra; Franz – personificado por Carlos Claramunt y Oscar Treto Hevia en ambas funciones- aportaron brillo con su excelente técnica y expresividad.
Swanilda -interpretada por Martha Alcaraz en la primera función y por Sandra Fernández en segunda función- sorprendieron con movimientos delicados y exquisitos mientras el cuerpo de baile de la Escuela Municipal de Ballet que entraba en escena para interpretar a los habitantes del pueblo, realizó movimientos desde los más sencillos a los de mayor dificultad pero llenos de refinamiento.
El vestuario espléndido e impecable – confeccionado en el taller de Cultura bajo la supervisión de Elisa Espinosa– adornó los formidables movimientos ejecutados en toda la obra con cuidada iluminación de Ángel Hiram Salomón.
Las danzas mazurcas alegraron y sorprendieron con la excelente sincronización de la música, las y los bailarines solistas construyeron un ambiente de encanto en los espectadores que observaban belleza fina y estética en el escenario.
Momentos de elegante comedia se dieron en ese fantástico taller de Coppélius en el cual los juguetes cobraron vida, las niñas y niños identificaron a esos personajes clásicos que conforman su imaginario de ternura e inspiración, las familias se involucraban en los momentos de tensión que Coppélia vivía para defender su amor, y los presentes expresaron con aplausos su gozo ante la magnífica coreografía con movimientos de juguete.
El Vals de las Horas, sin duda reafirma la calidad y disciplina de cada una de las bailarinas que han sido dirigidas y formadas por un reconocido grupo de maestros que se ha mantenido atento a la formación técnica y académica necesaria para llevar a escena este magno espectáculo.
Coppélia es la evidencia plena de que la Compañía Ballet de Mazatlán y la Escuela Municipal de Ballet de Clásico bajo la dirección de la maestra Zoila Fernández, trabajan para convertirse en referentes de excelencia del ballet en la escena nacional.
La motivación y la inspiración que fabricó todo el talento artístico, técnico, musical y de vestuario que participó en Coppélia, se reflejó en pequeñas niñas que vestidas de bailarinas asistieron al teatro para gritar al final de la obra… ¡Bravooo!