Se apaga la inigualable voz de Dulce. La cantante falleció a los 69 años de edad. La noticia fue revelada a través de las redes sociales del programa “Hoy” este 25 de diciembre.
“Lamentamos el sensible fallecimiento de Dulce, de las mejores voces de México. QEPD”, posteó en su red.
Apenas el 4 de diciembre, el equipo de Bertha Elisa Noeggerath Cárdenas, nombre real de la cantante, desmintió que tuviera un pulmón colapsado o metástasis, como se aseguró en algunos medios; sin embargo, un día después, el 5 de diciembre informaron que Dulce fue sometida a una operación de decortación pleuropulmonar.
Posteriormente, informaron que tras 48 horas bajo supervisión médica por su cirugía, Dulce se recuperaba favorablemente. Aunque en víspera de Navidad, se confirmó su muerte.
“Hermana, ya estas con nuestra mamá en el cielo cantándole, te voy a extrañar descansa en paz ,te amo”, escribió su hermana.
Sobre su carrera
Dulce nació el 29 de julio de 1955 en Matamoros Tamaulipas. Su carrera musical comenzó en la banda Toby en 1974. Desde muy joven viajó hasta monterrey, nuevo León para estudiar psicología.
Mientras la carrera de Dulce despegaba, en 1978 viajó a España para participar en el Festival de Mayorca, donde obtuvo 4 premios con una composición de Armando Manzanero. Sus galardones fueron por mejor interpretación, mejor canción, cantante más fotogénica del festival y mejores arreglos.
Su padrino fue el cantante José José, quien ofreció conseguirle una disquera cuando la escuchó cantar en un bar.
Entre sus temas más recordados destacan «Tu muñeca», una desgarradora balada que consolidó su lugar en la escena musical, y «Heridas», un himno al desamor que aún es referencia en el repertorio romántico.
Otros éxitos como «Lobo», «Déjame volver contigo» y «Amor en silencio» capturaron las emociones de su público con letras profundas que narraban historias de amor, dolor y esperanza.
Su interpretación emotiva y su capacidad vocal le permitieron conquistar escenarios en México y en el extranjero, ganándose el respeto de sus colegas y la admiración de sus seguidores.
A lo largo de su trayectoria, Dulce trabajó con destacados compositores y se distinguió no solo por su talento vocal, sino también por su elegancia y estilo único en el escenario. Canciones como «Hielo» y «Aún lo amo» demostraron su capacidad de conectar con el público a través de temas que reflejaban situaciones sentimentales universales.
Además de sus éxitos musicales, Dulce participó en teatro y televisión, expandiendo su legado artístico. Su fallecimiento representa una gran pérdida para la música romántica mexicana, pero su voz y su obra permanecerán como un testimonio de su talento y pasión por el arte.
Hoy, el mundo de la música despide a una artista que dedicó su vida a transmitir emociones a través de sus canciones. Con temas como «No soy tuya» y «Rompecorazones», su legado se mantendrá vivo en las generaciones que crecieron escuchándola y en aquellas que descubrirán su música en el futuro.
El legado de Dulce continúa siendo un referente destacado en la historia de la música romántica en español.
