Culiacán.- La compañía teatral mazatleca Colectivo Los Pata Salada, participó en el programa Ecos del Festival Cultural Sinaloa 2023 con el monólogo Un lugar para los momentos tristes, en el que la actriz Dulce Guzmán hace gala de su versatilidad al interpretar a varios personajes a los que, como narradora, va dando vida, seguida por el sonido de la guitarra interpretada por Abraham Medina.
La historia, presentada en el Teatro Socorro Astol del Instituto Sinaloense de Cultura, se ubica en Mazatlán pero con escenarios en otras partes del estado, entre ellos ese Hermosillo, Angostura, Sinaloa, donde la madre de Iris se fue a dar clases y a la que desea ver.
La obra es de la autoría Manolo Díaz quien está a cargo de la dirección, y el guitarrista Abraham Medina está a cargo de la composición y ejecución musical en vivo, atemperando o remarcando los momentos dramáticos de la narración.
Una puesta en escena digna, donde se narra la infancia y juventud de Iris, quien sueña con ser actriz, como muchos chicos y chicas, e ingresa a un grupo de teatro liderado por un argentino que, acorde con el prejuicio que tenemos sobre esas gentes, es un pedante.
Desde que su madre la dejó, Iris se cría con su abuela, y convive con dos primos que son medio tarados, uno pequeño que se come los mocos y otro más grande apasionado de las luchas libres. Ella es una niña problema, todos lo dicen, indica un comunicado.
Narra diferentes anécdotas, entre ellas cuando a los doce años se fue sola a buscar a su madre a ese peligroso lugar en la sierra, donde los pistoleros del narco detienen los autobuses para ubicar quién va y quién viene.
Sorprende Dulce Guzmán con su capacidad para dar vida a los diferentes personajes que aparecen en el monólogo y de los que sabemos por la caracterización que de ellos hace Iris, y por los focos de diferentes colores colocados en torno a una tarima de madera, y que se apagan o se encienden de acuerdo con la aparición de cada uno.
El Colectivo Los Pata Salada surge en 2015 con actividades tanto en Guadalajara como en Mazatlán, diversificando la escena regional con montajes de textos contemporáneos como Amor, amor o el suelo bajo los pies, Aviones, Hojuelas de tabaco azucarado, Un muy largo ensayo para una canción con cuatro acordes y Can-maradas.
