El juicio de Pablo Lyle continuó su curso luego de dos días suspendido por la llegada del huracán Ian al estado de Florida, citó Univision.
En esta tercera audiencia, la fiscalía terminó de interrogar a sus testigos, mientras que la defensa presentó a algunos de los suyos, Ana Araujo, la esposa del actor, fue una de ellas.
Aunque en junio pasado, Ana Araujo llamó a Pablo Lyle como su «ex esposo», dijo en la corte que no están separados. Incluso, aseveró que se está hospedando en el mismo Airbnb que está rentando el actor.
Además, Tanya Charry reveló en El Gordo y la Flaca que los hijos del actor también están en la ciudad de Miami.
Aunque se había dicho que Ana Araujo testificaría a través de una videollamada, la empresaria estuvo presente en la corte de Miami para dar su declaración de los hechos. Con ayuda de una traductora contestó en español las preguntas de los abogados de su esposo y de la fiscalía.
Detalló sobre los pasajeros que iban en el automóvil donde viajaban:
«Lucas (iba al volante), Pablo en el copiloto, yo sentada atrás de Lucas y venía Mauro, mi hijo conmigo, y luego Aranza (su otra hija) y Thiago. Recuerdo que Lucas tomó una salida que después se dio cuenta que no era la correcta», señaló en la audiencia que el programa Ventaneando transmitió.
Explicó que tras equivocarse de salida, Lucas continuó su camino, lo que provocó que comenzara a escuchar el claxon de un auto de manera «agresiva».
«Comenzamos a escuchar un claxon que nos empezó a tocar súper fuerte, era muy agresivo, duró mucho tiempo. De hecho, a mí me pareció muy exagerado», relató.
Llegaron al cruce de una avenida y fue donde escuchó a un «señor gritando, insultando, diciendo groserías».
«Me empezó a latir el corazón muy fuerte, y en eso escucho que golpean la camioneta».
Araujo afirmó que sí logró ver a la persona que le pegó al automóvil y la reacción de sus hijos fue de miedo.
«Mauro que venía al lado de mí me abrazó muy fuerte y empezó a llorar y trató de protegerse conmigo, recuerdo que Aranza se tapó los oídos y trató de hacerse bolita, al lado de mí».
Agregó que Lucas Delfino «se baja de la camioneta, se bajó y el señor lo agarró y se fueron avanzando para atrás y los perdí de vista».
«Recuerdo que Pablo estaba intentando detener la camioneta porque me doy cuenta que sigue avanzando, había una avenida, estaban pasando coches. En ese momento estaba en pánico, los niños estaban muy asustados, estaban haciendo mucho ruido y veo la cara de Pablo asustado tratando de detener la camioneta», relató.
«Yo traté de querer ayudar a poner parking, pero no pude porque tenía el cinturón de seguridad y tenía a los niños encima de mí, recuerdo que Pablo sale de la camioneta y le grita a la persona que estaba ahí ‘Tranquilo, hay niños en el coche'», explicó la empresaria.
Otro de los testigos que dio su declaración fue el médico forense que le practicó la autopsia a Juan Hernández.
De acuerdo con información de Tanya Charry, dictaminó que la causa de muerte del hombre de 63 años «había sido homicidio, fue el golpe que el señor Hernández se había dado cuando cayó al piso, que pegó su cabeza con el concreto», lo cual fue provocado por el puñetazo que Pablo Lyle le dio.
La fiscalía mostró al jurado fotografías de la autopsia, lo que causó mucha reacción, detalló la colaboradora de El Gordo y La Flaca.
También se explicó que no se le practicó un examen toxicológico al occiso porque solo se hacen cuando la persona muere en el instante, y Hernández falleció cuatro días después en el hospital, situación que la defensa refutó en varias ocasiones.
Después de que Lucas Delfino también rindió su declaración el viernes, la juez espera que el lunes 3 de octubre se termine la etapa del interrogatorio a los testigos, para que el jurado pueda deliberar el veredicto.
El actor mazatleco Pablo Lyle es acusado de homicidio involuntario de Juan Hernández, a quien atacó y al caer se golpeó la cabeza, muriendo cuatro días después, esto en 2019. (Foto: Tomada de la revista Quien)